Las oportunidades perdidas.

No sé por qué hoy me he puesto a pensar en eso de las oportunidades. Desde que recuerdo siempre he dado oportunidad para todo, porque claramente sé que si las doy también me las darán a mi. Y así a sido. Cuando hablo de oportunidades ( no me refiero a ofertones de mercadillo, claro !), me refiero a que todos nos merecemos una oportunidad cuando nos equivocamos, y no solo una, todas las que hagan falta porque ya sabemos que tropezamos cuatrocientas mil veces y en la misma piedra. Tampoco quiero decir que haga falta equivocarse para que te den una oportunidad.

Me acuerdo que con quince años había un niño que llevaba un año pidiéndome para salir. Yo la verdad que pasaba completamente, además es que no me gustaba para nada. A mi me gustaba otro. Pero en fin... mi hermana estaba loquita por su amigo, y éste cogió y me dijo que si yo salía con su amigo, él saldría con mi hermana. Total, que pensé en darle al chaval una oportunidad, porque la verdad que aunque no me gustaba, pero quién sabe, además yo moría porque el niño que me gustaba también me la diera a mi.

Así que nos vimos saliendo tres parejas, mi hermana y el P. yo y el J. y mi amiga con otro amigo de ellos. La verdad es que nos lo pasábamos bien. Y el J. me dio mi primer beso. Me acordaré toda la vida. Si cerraba los ojos el chaval me gustaba, pero los abría y...pensareis: ¡qué superficial! La verdad es que con quince años sí que eres un poco superficial... o no? Así que el día en que las otras dos parejas cortaron y él me dijo sentado en una portería: Aunque ellos ya no salgan yo no te voy a dejar, porque te quiero. -¡Dios! creía que me moría... no podía ser, si estaba deseando que también me dejara él a mi. Porque a mi me daba como cosa cortar... ¡Qué niña! Es que no me lo podía creer! ¿Que me quiere? ¿pero de qué me quiere a mi este?, anda anda.... si somos dos niños...

Total, que esa tarde quedé con otra amiga y sus amigos universitarios. Y casualidades de la vida, porque eso si fue una casualidad, yo no tuve nada que ver, el J. me vio con ellos. Y su amigo vino a decirme: de parte del J. que te vayas a tomar por cul......piiiiii. Y ahí se acabó su historia de amor.

Tres años después, volví a coincidir con él. Y otra vez me volvió a pedir salir. ¡Que perra que tiene este conmigo! Por supuesto le dije que no. Ya tuvimos nuestra oportunidad ( nuestro punto en el destino ya pasó). Y una noche a las 0:00 vino a verme para despedirse y decirme:

-Lo siento, sé que perdí mi oportunidad, tú no me quieres.

- (yo como siempre tenía que soltar mi rollo) No soy buena para ti, te mereces a alguien mejor....

http://es.youtube.com/watch?v=wennoL8Od2c