Episodio en el cráneo-tiempo
Me gustaría tener algo que hacer
en este lado de esquina del nosédónde,
tengo las horas contadas, ocho duermo,
dos como, veinte para cosas que hacer.
Al final estoy cansada ¿hice algo?.
Me parto la cabeza contra el minuto.
Te lo juro, sé que estuvo aquí,
pero se fue temblando, ¡no!, paseando,
¡no! resbalando, la mano, ¡ lo alcaaaaanzooo!
y detrás me voy, empotrada contra el minuto,
nos caemos los dos lascivamente,
¡quítame las agujas de encima, guarro!
pero no me estaba tocando, yo le seguí porque quise
decididamente, me lo estaba buscando.
¡Ay!, ¡qué difícil es la prioridad si te hundes de lado!
comenzaba yo a contar las fechas por cada desengaño...
Y aquí me detengo.
Al menos soy libre, me digo, riéndome un poco,
pero sospecho que fue algo que comí,
y pasará, como todo.
(29.05.1996)
Esto lo escribí hace 10 años. Intento pensar cual es mi situación ahora respecto de entonces. Han pasado muchas cosas. Las que yo he buscado con mi hiperactividad fulminante y las que he tenido que sufrir, retorciéndome repetidamente bajo los golpes y automartirizandome por mi poca paciencia.
Me gusta la vida que tengo ahora. Sigo partiendome la cabeza contra el minuto, pero tengo más claras las prioridades, y intento no contar las fechas de cada desengaño... Ya no siento que la libertad sea una comida que me ha sentado mal. Estoy más a gusto con este traje de persona, y aunque a veces se moje o se ensucie un poco, lo llevo con más estoicismo , porque ahora soy capaz de calentarme el corazón con el recuerdo de las cosas maravillosas que he vivido.
Besos querida spring.
Me gustaría tener algo que hacer
en este lado de esquina del nosédónde,
tengo las horas contadas, ocho duermo,
dos como, veinte para cosas que hacer.
Al final estoy cansada ¿hice algo?.
Me parto la cabeza contra el minuto.
Te lo juro, sé que estuvo aquí,
pero se fue temblando, ¡no!, paseando,
¡no! resbalando, la mano, ¡ lo alcaaaaanzooo!
y detrás me voy, empotrada contra el minuto,
nos caemos los dos lascivamente,
¡quítame las agujas de encima, guarro!
pero no me estaba tocando, yo le seguí porque quise
decididamente, me lo estaba buscando.
¡Ay!, ¡qué difícil es la prioridad si te hundes de lado!
comenzaba yo a contar las fechas por cada desengaño...
Y aquí me detengo.
Al menos soy libre, me digo, riéndome un poco,
pero sospecho que fue algo que comí,
y pasará, como todo.
(29.05.1996)
Esto lo escribí hace 10 años. Intento pensar cual es mi situación ahora respecto de entonces. Han pasado muchas cosas. Las que yo he buscado con mi hiperactividad fulminante y las que he tenido que sufrir, retorciéndome repetidamente bajo los golpes y automartirizandome por mi poca paciencia.
Me gusta la vida que tengo ahora. Sigo partiendome la cabeza contra el minuto, pero tengo más claras las prioridades, y intento no contar las fechas de cada desengaño... Ya no siento que la libertad sea una comida que me ha sentado mal. Estoy más a gusto con este traje de persona, y aunque a veces se moje o se ensucie un poco, lo llevo con más estoicismo , porque ahora soy capaz de calentarme el corazón con el recuerdo de las cosas maravillosas que he vivido.
Besos querida spring.
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